El proyecto deportivo de la Federación Andaluza de Bádminton (FAB) sigue creciendo. Y es que el pasado lunes 15 de junio, la consejería de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, a través de su secretario general, José María Arrabal Sedano, resolvía otorgar la calificación de Centro Especializado de Tecnificación Deportiva al centro deportivo de bádminton que la FAB, con el indispensable apoyo del ayuntamiento de
Huelva, tiene ubicado en el Palacio de Deportes Carolina Marín.
La FAB comenzó el proyecto del Centro de Tecnificación Deportiva en el año 2002, cuando los deportistas Mario González, Carlos Longo, Jonatan Longo, Eliezer Ojeda y Álvaro Sánchez se desplazaron a San José de La Rinconada (Sevilla) para formar parte, junto a destacados deportistas locales como Antonio Jesús Barriga, Rafael Fernández, Laura Molina o Jonathan Romero, entre otros, del primer grupo de entrenamiento del CTD, bajo las órdenes del técnico Antonio Molina.
Siete fueron los años que el centro de entrenamiento estuvo ubicado en el municipio rinconero y muchos los deportistas que pusieron en manos de la FAB su formación deportiva, obteniendo grandes resultados y pasando, posteriormente, al Centro de Alto Rendimiento Joaquín Blume de Madrid, siendo el pionero el ya mencionado Jonatan Longo y siguiéndole otros como es el caso de los onubenses Carlos Longo, Haidée Ojeda y Ana María Martín, los roteños Álvaro Sánchez y Ernesto Velázquez o el local Juan Manuel Fernández Quiles, que tuvieron magníficos compañeros de entrenamiento en varios deportistas foráneos, como los indonesios Ruben Gordon, Stenny Kusuma y Hendry Winarto, o la china Bing Xin Xu.
EN LA TEMPORADA 2008-09 CARLOS LONGO TOMA LAS RIENDAS Y HUELVA COBRA PROTAGONISMO
Ya en la última temporada del CTD en tierras rinconeras, la 2008-2009, el onubense Carlos Longo, recientemente retirado de la alta competición, tomó las riendas del centro de entrenamiento para, al año siguiente, trasladarlo a
Huelva, donde se daría un giro al proyecto de formación de talentos.
De esta forma,
Huelva se convirtió en una de las pocas ciudades andaluzas en contar con un Centro de Tecnificación, estableciéndose éste en el barrio El Conquero, con tres puntos principales: el Colegio Mayor San Pablo, lugar de residencia de los internos Antonio García, Miguel Hernández, Lucía Martos y Ángel Villanueva; el IES Alto Conquero, centro de estudios de éstos y en cuyo pabellón se desarrollaron los entrenamientos técnicos; y la Ciudad Deportiva de
Huelva, donde tenían lugar los entrenamientos físicos. La dirección técnica estuvo formada por Carlos Longo y el indonesio Hendry Winarto, que se había establecido en
Huelva un año antes, aunque abandonaría el proyecto a los pocos meses.
Tras varias temporadas con excelentes resultados, incluyendo varias medallas en los Campeonatos de España y la presencia de nuestros deportistas en las Selecciones Nacionales de categorías inferiores, en el año 2012 la crisis económica se hizo notar y obligó a la FAB a cerrar el CTD, ante la imposibilidad de mantener económicamente el proyecto. Serían dos años en los que la dirección técnica de la federación comenzaría a gestar un nuevo enfoque del centro de entrenamiento que, esta vez, iría de la mano del Ayuntamiento de
Huelva, uno de los socios principales de la Federación Andaluza de Bádminton y una de las entidades a nivel nacional que más apoyo ha dado en nuestro deporte en los últimos años.
Carolina Marín, durante un entrenamiento en 'su' Palacio.Carolina Marín, durante un entrenamiento en 'su' Palacio.
Carolina Marín, durante un entrenamiento en 'su' Palacio. / JOSUÉ CORREA
De esta forma, en 2014, el Centro Andaluz de Entrenamiento se estableció en el Polideportivo Diego Lobato, uno de los pabellones de titularidad municipal de la ciudad y que ha acogido, a lo largo de los últimos 30 años, grandes eventos de nuestro deporte, como el Máster Jóvenes Sub-13 y Sub-17, Campeonatos de Andalucía de todas las categorías, encuentros de Liga Nacional y Liga Andaluza de Clubes e incluso la competición de bádminton de los Juegos Europeos de Policías y Bomberos de
Huelva. De esta forma, la ciudad se convierte en el centro neurálgico del bádminton andaluz en lo referente al entrenamiento y la formación de jóvenes talentos, gracias al asentamiento definitivo del C.A.E.
Uno de los grandes puntos de inflexión tiene lugar en el año 2017, cuando la FAB consigue una apuesta en firme tanto del ayuntamiento de
Huelva como de la Junta de Andalucía por su proyecto del Centro Andaluz de Entrenamiento, que posteriormente pasaría a denominarse Centro Andaluz Especializado en Tecnificación Deportiva. Por una parte, el consistorio onubense decide dedicar a nuestro deporte, en exclusividad, la sala anexa del Palacio de Deportes Carolina Marín, cediendo a la FAB la gestión de ésta. Por la otra, la Junta de Andalucía refuerza su apoyo a la FAB iniciando los trámites para la catalogación del C.A.E.T.D. a nivel autonómico, un paso imprescindible para obtener la catalogación nacional por parte del Consejo Superior de Deportes.
De esta forma, la Federación Andaluza de Bádminton se consolidó como uno de los referentes a nivel de tecnificación, tal y como había hecho a nivel formativo y de organización de grandes eventos, una parcela que reforzaría con su decisiva participación en la organización de los Campeonatos de Europa Absolutos
Huelva 2018 y los próximos Campeonatos del Mundo Absolutos y Sénior
Huelva 2021.
Otro de los horizontes que se abren para el CAETD es el desarrollo de diferentes estudios con universidades andaluzas y otros centros de formación relacionados con el deporte, aprovechando las buenas relaciones que la FAB ha ido forjando con éstos. Disponer de un grupo de jóvenes deportistas de alto rendimiento que realizan sus entrenamientos a diario en una instalación como el Palacio de Deportes Carolina Marín supone una multitud de posibilidades en el ámbito de la investigación en materia deportiva.
La última implementación del centro de entrenamientos ha sido la incursión en la disciplina del Parabádminton, modalidad paralímpica de este deporte, tras la incorporación a principios de este año del onubense Francisco Motero, integrante de la Selección Nacional en la modalidad WH-5 (en silla de ruedas). El deportista, tras una larga temporada en Toledo, donde se encuentra el prestigioso Hospital Nacional de Parapléjicos, ha retornado a
Huelva y se ha puesto en manos de Carlos Longo para continuar con su carrera deportiva, obteniendo rápidamente grandes resultados en los torneos que ha disputado y posicionándose como uno de los referentes nacionales en su modalidad, así como un ejemplo de superación para sus jóvenes compañeros de entrenamiento, con los que ha encajado desde el primer momento.
Todos estos logros e interesantes proyectos, tanto deportivos como del ámbito social, que la Federación Andaluza de Bádminton desarrolla a través del Centro Andaluz Especializado en Tecnificación Deportiva, no serían posible sin el apoyo de las dos entidades que ofrecen un respaldo fundamental: de una parte, la Junta de Andalucía, a través de la consejería de Educación y Deporte, que es el gran valedor económico del centro. Y es que, a través de la subvención anual que la FAB recibe del Gobierno Autonómico, se sufragan la mayor parte de gastos derivados del CAETD, por lo que su funcionamiento sería imposible sin este apoyo. De otra parte, el Ayuntamiento de
Huelva proporciona todas las infraestructuras necesarias para poder desarrollar las actividades propias del CAETD, con la ya mencionada cesión de la sala anexa del Palacio de Deportes Carolina Marín, así como diferentes salas en las que se desarrollan otro tipo de entrenamientos más específicos.
De forma adicional, el Consistorio onubense y FAB mantienen un convenio económico mediante el que se sufraga una parte de los gastos de funcionamiento del centro, una aportación que ha ayudado a dar un salto de calidad a nivel estructural y de actividades.
Gran día, sin duda, para el bádminton andaluz, que sigue recorriendo el largo camino hacia la calificación nacional de su centro de entrenamientos, en el que esperan seguir formando deportistas y, sobre todo, personas en los próximos años.