El lateral Carlos Puga debutó como titular con el Málaga hoy ante el Recreativo de Huelva: "pues es muy fácil jugar aquí. Al final con la afición, la gente apoyándote, hacía tiempo que no vivía esto, desde hace más de un año, el jugar con tanta gente y, nada, muy contento por coger otra vez minutos, que llevaba mucho tiempo sin jugar, y, nada, a seguir como hemos jugado este partido, y partido a partido y lo que vaya viniendo". 
 
Dio "muchas gracias" por las felicitaciones para luego explicar que su titularidad no le había cogido de sorpresa: "a ver, sorprender sorprender, no. Siempre tienes esa duda. Todo jugador quiere jugar al llegar a un equipo nuevo y, nada, estaba entrenando muy bien, la verdad, que estaba muy cómodo con los compañeros, me he entendido genial y siempre tenía esa duda y tienes esa incertidumbre de si te va a poner. Al final todo futbolista se tiene que crear la idea de que vas a jugar, porque si vienes pensando que no vas a jugar al final no estás preparado, así que, nada, me lo ha dicho cuando hemos entrado en el vestuario y, nada, concentrado y para delante". 
 
Volvió a dar "muchas gracias" por la enhorabuena para contestar que "no" era una papeleta jugar con más de veinticinco mil personas en La Rosaleda, todo lo contrario: "no, eso es lo que debería de gustar a todos los jugadores, pero, vamos, a mí no me gusta jugar en un campo donde haya mil personas o quinientas personas, vamos. Al final, contra más gente mejor. Hoy ha salido bien, hemos ganado 2-0, pero es que, cuando vas perdiendo, es lo que te da eso para tirar para delante. A mí la verdad es que contra más personas mejor. Ojalá tuviera más capacidad el estadio, para que vengan más". 
 
Asintió sobre el hecho de que fue el primer partido del Málaga en el que se agotaron las localidades esta temporada: "a ver, he vivido el partido del Baleares. Yo desde dentro la verdad es que no... si te soy sincero estoy concentrado y no me doy cuenta. Es en el momento en el que me cambian, cuando me siento, y veo a la gente loca perdida y digo ¡madre mía!, y que el fondo levanta todo el estadio en un momento es una locura. Ahí es cuando me doy cuenta, pero jugando la verdad es que no me entero mucho". 
 
Estaba "totalmente" de acuerdo en que "es verdad que no es lo mismo jugar en casa que fuera y te cuesta, por ejemplo, ir a campos donde no hay mucha afición, pero, bueno, al final el Málaga... vamos a Melilla y mete... no sé si metió mil o dos mil personas o en Granada metisteis cinco mil personas, eso es una locura. Al final vas a encontrar del apoyo de la afición, pero es verdad que sí, fuera te puede costar más entrar en el partido porque aquí sales y al final estás metido por la gente". 
 
Preguntado por cómo se había sentido durante el partido, respondió: "a ver, muy cómodo. Es verdad que a mí siempre me ha pasado tipo gemelos pero al final llevo tres meses sin jugar un minuto. Al final creo que eso es coger ritmo, tener minutos y eso en tres partidos, si tengo la suerte de jugar, en tres partidos puedo aguantar el partido entero, pero al llevar tres meses sin jugar minutos cuesta meterte en un partido noventa minutos con la exigencia del Recre, cuando hacía mucho calor a las doce de la mañana, un partido complicado para nada, creo que he estado muy a gusto y me he sentido muy cómodo con los compañeros, tanto con Nelson, Ferre, Genaro, que son los que están cerca de mi puesto, así que, nada, muy contento, la verdad", dijo para luego marcharse con un "hasta luego" de la sala de prensa.